Categoría: Obra nueva

Ubicación: Fruiz, Bizkaia

Extensión: 190 m²

Año: 2016

Proyecto de vivienda unifamiliar desarrollado en planta baja ubicado en una granja. El sistema constructivo de este proyecto responde a las necesidades y capacidades del cliente. 

El presupuesto disponible era absolutamente insuficiente para el desarrollo de una obra de manera convencional. Sólo alcanzaba para la compra de materiales siendo estos de bajo coste. No hay presupuesto para la contratación de mano de obra. De esta manera el proyecto se plantea como de autoconstrucción aprovechando el conocimiento de obra de la cliente y su hermano. Gracias al conocimiento de la cliente de proveedores que le abastecen de paja para los animales orientamos el proyecto a ese material. No sólo se emplea la paja como relleno sino como elemento estructural. Se realizan muros de carga construidos íntegramente en paja. Lo que popularmente se denomina Nebraska Style.

A la selección de materiales habitualmente asociados a la bioconstrucción añadimos el conocimiento de una construcción de calidad y altamente eficiente que nos proporciona nuestra formación y experiencia como Passivhaus Designer.

La construcción del edificio lejos de generar emisiones de CO2 a la atmósfera es un sumidero de CO2. Los materiales más abundantes son derivados del mundo vegetal: la paja y la madera. En la cimentación sí se emplea el hormigón armado. El tejado según obliga la normativa municipal es de teja roja. Los materiales de recubrimiento de la paja de fachada son dos tipos de revoco, al exterior de cal y al interior de arcilla ambos en espesores de 5cm.

La vivienda se sitúa en un entorno rural aislado de la red eléctrica. La energía eléctrica se produce mediante un generador de diésel. En una fase posterior se planteará la autosuficiencia energética mediante el uso de energías renovables: eólica y fotovoltaica.

La reducida demanda de calefacción se satisface a través de una estufa de pellet. El agua caliente se produce mediante un calentador de butano.

Como ya hemos dicho el presupuesto es muy modesto aproximadamente 300€/m². Las carpinterías han sido recicladas de otra obra donde se han desmantelado. Varios de los materiales empleados también son reciclados o sobrantes de otras obras. Por estas limitaciones no es posible alcanzar las prestaciones del estándar Passivhaus (sí sería posible con otras ventanas y un recuperador de calor). A pesar de todo, la eficiencia energética es muy alta incluso superior a la exigencia del CTE para una obra de estas características.