Categoría: Obra nueva

Ubicación: Gorliz, Bizkaia

Extensión: 360 m²

Año: 2007

Vivienda materializada en piedra negra como una gran roca surgida de la ladera.

Formando un podio del que surgen sendos diedros bajo los que se distribuyen las estancias. Las cubiertas se entrelazan sobre el salón generando un espacio de mayor altura.
Una vivienda para disfrutar de su entorno.

La formalización de la vivienda es el resultado de su adaptación a los condicionantes externos: climáticos, topográficos, soleamiento… Fuerte pendiente descendente en sentido sur-norte, violentos vientos que arrastran agua de lluvia desde el norte y el oeste donde se encuentra el mar.

Por estas razones la vivienda adquiere una forma de L cuyos brazos bloquean los vientos dominantes. El nivel en el que se ubica la vivienda, elevada sobre el perfil original, permite crear un jardín orientado al sur relacionado con la cocina y protegido de los vientos dominantes. Las vistas hacia el mar y la puesta de sol se disfrutan desde el salón y la terraza a la que se vincula. Resultado del desnivel existente surge un semisótano que sirve para alojar a los invitados y que además funciona como un cajón de sastre donde tocar la batería, jugar los días lluviosos…

La estructura es de hormigón armado y acero. Siendo los pilares de este último material. Gracias a su reducida sección es fácil integrarlos en el cierre del muro cortina.